Gonzalo Montiel y el recuerdo de cuando la tercera estrella se bordó en los corazones argentinos

GONZALO MONTIEL no olvidará jamás el momento en el que le regaló a los argentinos la tan deseada tercera estrella, esa que bajó del cielo albiceleste y depositó simbólicamente en forma de copa en las manos de todos sus compatriotas.

Hace exactamente un año, el 18 de diciembre de 2022, a las 14.55 de todos los relojes argentinos, su derechazo infló la red y desinfló la ilusión del arquero francés Hugo Lloris. Al mismo tiempo, convirtió ese instante mágico en una euforia continuada y una alegría eterna.

 

 

Una y otra vez rememoró esa situación, pero ahora lo hizo al cumplirse el primer aniversario de la gesta en Qatar. "Sólo estaba enfocado en patear; cuando entró, me cayó la ficha: habíamos salido campeones del mundo. Fue un desahogo", contó en diálogo con Dsports.

El destino quiso que fuera él el encargado de abrir las puertas de la historia y no Lautaro Martínez, que le pidió la ejecución de ese cuarto disparo de la tanda. "El Toro siempre me dio su apoyo, es una gran persona. Justo me tocó a mí pero él me había dicho que lo quería patear", manifestó.

Minutos antes, la pelota impactó en su codo tras un derechazo de Mbappé y eso decantó en el penal para Francia que estableció el 3-3 en los 120 minutos. "Sentí que les estaba fallando a mis compañeros y a todo un país, pero gracias a Dios tuve una revancha", confesó.

"La verdad es que trato de disfrutarlo todos los días, me emociono cuando veo cada imagen del Mundial. Es algo único que me tocó vivir como experiencia", se sinceró, y agregó que "después fue una locura; tratamos de disfrutarlo, de vivirlo, porque es algo único. No muchos tienen  la posibilidad de ser campeones del mundo".

Montiel resaltó su momento especial con el máximo símbolo del equipo, Lionel Messi: "El abrazo con él después de salir campeones fue único; le agradecí por todo lo que hizo por nosotros, es un señor capitán".

También contó que "en el partido contra México hubo mucha tensión. Si perdíamos estábamos prácticamente afuera, hasta que apareció el 10. Gracias a Dios pudimos ganarlo y a partir de ahí cambió todo".

Desafiado a catalogar con una sola palabra cada partido de los 7 que Argentina disputó en el Mundial, contestó: "Arabia Saudita, duro; México, emoción; Polonia, contento; Australia,  seguir; Países Bajos, durísimo; Croacia, disfrute; Francia, eterno".

Al evocar sus comienzos en el fútbol, Gonzalo reflexionó: "Sé de dónde vengo, cuánto me costó llegar a primera, cuánto luchamos con mi familia. A veces no tenía para viajar, me fui a vivir a la pensión desde muy chico. Siempre mis viejos hicieron todo lo posible para que nunca me falte nada".

Sobre su presente complicado en Nottingham Forest, donde no tiene el rodaje que quisiera y al que llegó a préstamo desde Sevilla, reconoció que "está complicado pero sigo entrenando, luchando para cuando me toque, siempre firme para llevarla bien".

Respecto de una posible vuelta a River de la que se habló hace unos días, fue terminante: "Hace poco salió la entrevista de Brito (Jorge, presidente del Millonario) y ya lo dejó claro. Todavía no es el momento. Estoy en Nottingham y sigo entrenándome para cuando me toque".