El plan de Bielsa para contrarrestar a Messi y romper la racha de Argentina

URUGUAY se muestra a priori como el rival más duro que enfrentará Argentina en lo que va de este perfecto 2023, en el que luce el título de Campeón del Mundo a través de una racha que lleva 8 partidos con 8 victorias, con 20 goles y sin tantos en contra.

El equipo de Marcelo Bielsa de a poco encuentra la forma que quiere su entrenador y viene de un magnífico triunfo contra Brasil en el Centenario, por lo que el clásico del Río de la Plata promete convertirse en un durísimo examen para la Albiceleste.

La Celeste contará con la vuelta del implacable Luis Suárez, en su primera convocatoria a las órdenes de Bielsa, que tiene bien claro cómo debe plantearse el partido para intentar lograr el éxito. 

"Argentina hace mucho tiempo que juega del mimso modo, con el mismo estilo. Nosotros vamos a intentar jugar, ellos van a intentar jugar. Ninguno de los dos equipos va a descartar ponerle mucha dedicación e importancia a la recuperación de la pelota", afirmó el conductor. 

Y continuó: "Yo no me imagino que Argentina no intente manejar la pelota y yo no me imagino a Uruguay sin tratar de evitarlo con mucha dedicación. Si solamente pensamos en defender es el camino más corto para dar el partido por perdido, de eso estoy seguro. Si uno a un rival como Argentina le juega todo el partido defendiendo, con un planteo predominantemente defensivo, las posibilidades de éxito son muy bajas".

Con esa premisa, puede vislumbrarse un encuentro en el que a la Scaloneta le costará monopolizar la tenencia del balón o en el que tendrá que mostrar más precisión que nunca para evitar perderla ante la presión uruguaya, que por otra parte es una de las marcas registradas del repertorio táctico del rosarino.

Pero hay otra situación preocupante para el conjunto charrúa: Lionel Messi. En ese sentido, Bielsa reconoció que "no hay un método o una fórmula infalible para marcarlo. Creo que no hay una forma. Y por el bien del fútbol es mejor que así sea. Habrá que preguntarle a él qué será lo conveniente para evitar que juegue". 

"No hay entrenador al que antes de jugar contra Messi no se le pregunte lo mismo: cómo frenarlo. Es el mejor del mundo y ninguna fórmula fue efectiva. No hay un método o un procedimiento que sea lo suficientemete efectivo. También ha jugado partidos en los que no lució, pero no porque se haya encontrado una fórmula infalible", sostuvo.

En ese sentido, concluyó, "las preguntas que nos han hecho a todos los entrenadores no han sido ningun aporte. Y es mejor que así sea por el bien del fútbol".