Primera División

Los meses malditos de Darío Benedetto

La nefasta sucesión de hechos que convirtieron al ídolo en enemigo íntimo del Boca de Almirón.

Por Redacción EG ·

28 de agosto de 2023

DARÍO BENEDETTO supo darle muchas alegrías a Boca. Además de ser hincha confeso,entre 2016 y 2019 convirtió 45 goles con esa camiseta y logró tres campeonatos, hasta que se fue a Olympique de Marsella tras el estigma que significó la derrota en la final de la Libertadores en Madrid, frente a River.

Su vuelta, en enero de 2022, fue muy celebrada por los fanáticos boquenses, que se esperanzaron con gritar innumerables goles surgidos de su calidad y efectividad. La ecuación marca que en la primera temporada hizo 16 tantos en 41 presentaciones, y que en 2023 lleva 11 en apenas 28 partidos, ya que fue una temporada signada por los inconvenientes físicos y de otra índole para el jugador.

Benedetto sumó otros tres títulos a su palmarés con el Xeneize, pero su desempeño estuvo lejos de lo que la gente y él mismo esperaban. Este domingo falló un penal que podría haber sido el empate sobre la hora de Boca ante Sarmiento en Junín y que agrandó el estigma que lo persigue desde los 12 pasos.

 

Benedetto erró ante Sarmiento su cuarto penal de los últimos 6 que pateó.
 

Después de los dos penales fallados ante Corinthians por la vuelta de los octavos de final de la Libertadores 2022 (uno al palo en tiempo reglamentario y otro a la segunda bandeja en la definición), el Pipa tuvo revancha ante Talleres pero volvió a errar. Después siguieron dos conversiones con Olimpo por Copa Argentina y en la definición con Nacional por la Libertadores, pero la decepción volvió a abrazarlo en Junín.

Además, dicha situación se da en medio de un pobre rendimiento y en un contexto en el que hoy por hoy Edinson Cavani es la opción número 1, Miguel Merentiel es la siguiente y recién después aparece el exjugador de Arsenal, que cada vez que tiene una oportunidad, no puede encajar en el andamiaje ofensivo ni aportar lo que siempre supo aportar.

 

Imagen Benedetto desmintió que haya querido irse de Boca con la llegada de Cavani.
Benedetto desmintió que haya querido irse de Boca con la llegada de Cavani.
 

Con la llegada del uruguayo Cavani se habló de cierta incomodidad de su parte que él mismo salió a desmentir: "Me encanta la llegada de Cavani a Boca, a pesar de que se dijeron muchas boludeces que me hicieron reír. Es un referente a nivel mundial, de los mejores que tuve".

Pipa manifestó que en la Argentina y Sudamérica sólo jugaría en Boca y que es eso o el retiro: "Se hablan muchas cosas, que vinieron de Inter de Porto Alegre, que vinieron de acá, de allá... Le dije a mi representante que a Brasil no me voy y que en el único club de Sudamérica que juego es en Boca. Si tengo que jugar en otro equipo de Argentina me retiro. Es una decisión personal que ya tengo tomada hace rato. Mi idea es seguir por lo menos hasta diciembre en Boca".

Benedetto sabe que el presente es gris y que no es fácil aventar los nubarrones: "No quiero entrar en ningún conflicto de nada. Me quiero concentrar en jugar y hacer lo mejor para el equipo. Hubo muchos quilombos y no me quiero meter en nada. Apoyo al equipo, cuando me toca jugar trato de hacer lo mejor y estoy tratando de volver al nivel. Con problemas personales, pero afrontándolo de la mejor manera y enfocado en lo que viene". 

Los cortocircuitos que atentaron contra la armonía del goleador en Boca fueron más allá de lo futbolístico y hasta se rumoreó cierto enfrentamiento con el vicepresidente Juan Román Riquelme sobre temas de dinero. Pero también fue tajante al respecto en diálogo reciente con ESPN: "Hubo un chispazo por el tema de los premios, normal, como pasa en cualquier equipo.Después quedé sucio, me decían mercenario. Resigné plata dos veces para venir a jugar a Boca, lo que menos me interesa es la plata.  Con Román está todo bien, conmigo se portó muy bien desde que llegué a Boca", sostuvo.

La voluntad de mejorar, está. Pero todavía no apareció el verdadero Benedetto: ese que hizo delirar a Boca con sus goles y no el que se fue entre sombras de la tarde dominical de Junín, frustrado por errar otro penal y envuelto en polémicas con el árbitro Sergio Trucco. "Dejá, es limitado", le dijo a su compañero Javier García que le reclamaba al juez por ciertas acciones del juego con la derrota de Boca ya consumada.

IMAGEN DE PORTADA: ALEJANDRO PAGNI / AFP