Primera División

Independiente: no se puede hacer todo al revés

El club que jamás se anticipa a los hechos ahora tiene que actuar y tomar decisiones ante una situación límite.

Por Panqui Molina ·

20 de agosto de 2023

RICARDO ZIELINSKI dejó de ser el entrenador de Independiente. Se fue en la primera fecha de la Copa de la Liga, luego de perder 1-0 ante Colón, en una nueva pobre producción futbolística, tras haber tenido una "minipretemporada".

 

Independiente 0 - Colón 1
 

Duró 18 partidos y nunca fue capaz de hacer valer el mote de "sacapuntos" por el que se ganó el respeto en el mundo del fútbol. Agarró a Independiente a 3 puntos de la zona de descenso y se fue casi en el mismo lugar, o quizás peor.

Si Huracán le gana el lunes a Banfield, lo alcanzará en la tabla anual y el Rojo deberá jugar un triangular por la permanencia junto al Globo y a Colón. Faltan 13 fechas (39 puntos) y todo puede pasar.

Zielinski esperó llegar a una situación límite para irse, los malos resultados previos no fueron suficientes para propiciar la salida.

Los dirigentes no tomaron la decisión antes porque esperaban un gesto del Ruso para no tener que afrontar la rescisión del contrato, firmado hasta junio de 2024. La perversa forma de comunicarle que su ciclo estaba vencido fue dejándolo solo tras la caída ante Colón. 

Era mucho más sencillo anticiparse a los hechos y no esperar a llegar a esta situación límite. Ya la derrota contra Boca en la última fecha de la Liga Profesional había dejado consecuencias, con un Libertadores de América que explotó contra todos. Pero en el fútbol cuando el descontento es generalizado y no se individualizan las responsabilidades todo sigue igual. 

Y así funciona Independiente. 

 

Imagen Debut en la Copa de la Liga, derrota ante Colón y despedida para Zielinski (FOTOBAIRES)
Debut en la Copa de la Liga, derrota ante Colón y despedida para Zielinski (FOTOBAIRES)
 

En el mercado de pases, encabezado por Pablo Cavallero, perdió demasiados días con Walter Kannemann, por quien estaban dispuestos a desembolsar una importante suma, mientras que por Cristian Tarragona hubo un cambio de condiciones a último momento que tiró para atrás la operación.

En medio de las urgencias económicas y las necesidades futbolísticas arribaron Mauricio Isla, Felipe Aguilar, Alexis Canelo y la decisión de Federico Mancuello de volver ante la situación crítica, más el regreso de Lucas González.

Llegó la minipretemporada y el nuevo aviso no tardó en decir presente: sucedió días atrás contra Central Córdoba por la Copa Argentina, en donde se clasificó a octavos de final por penales tras un pálido 0-0. Pero todo siguió igual.

En el comienzo de la Copa de la Liga contra Colón directamente fue menos de lo mismo. La efervesencia inicial producto del regreso de Federico Mancuello duró un puñado de minutos. En cuanto el equipo mostró sus dudas para adueñarse de la pelota y la enorme dificultad para concretar una sucesión de pases en campo contrario volvieron los murmullos desde las tribunas.  

 

Imagen Zielinski dirigió a Independiente en 18 partidos. Ganó 6 (uno por penales), empató 4 y perdió 8. (FOTOBAIRES)
Zielinski dirigió a Independiente en 18 partidos. Ganó 6 (uno por penales), empató 4 y perdió 8. (FOTOBAIRES)
 

Zielinski apostó por poblar el mediocampo, pero la falta de funcionamiento y la exasperante lentitud para los traslados provocó que la pelota se divida de más y en ofensiva no hubo quien abasteciera a un solitario Martín Cauteruccio.

Cuando quiso cambiar el rumbo del partido sacó a Sergio Ortiz y sumó a Matías Giménez en la ofensiva. A la lentitud le sumó cansanció. Con la modificación, Colón se le animó y pudo abrir la cuenta, pero desperdició un penal en los pies de Wanchope Ábila. Lejos de conmoverse ante la situación, en Independiente todo siguió igual. Y minutos después llegó el gol en los pies de Alberto Espíndola que sentenció una nueva derrota, la 4ª en los últimos 5 partidos entre Liga Profesional y Copa de la Liga. 

En este contexto, la salida de Zielinski se suma a la larga lista de decisiones desacertadas en 10 meses de gestión. El presidente original, Fabián Doman, renunció en abril de manera abrupta y el cargo fue para Néstor Grindetti, más abocado a la campaña electoral que al día a día del club. 

A eso se le podría agregar la partida de Pablo Cavallero, después de darle la responsabilidad de manejar el mercado de pases.

El club que jamás se anticipa a los hechos esperó a tener la soga al cuello para actuar. 18 partidos después todo sigue igual, aunque un poco peor.

 

FOTO DE PORTADA: INDEPENDIENTE