Las definiciones de Demichelis antes de ser campeón con River

MARTÍN DEMICHELIS está a pocas horas de lograr lo que anhelaba cuando llegó a River, hace apenas un semestre: ser campeón. Lo logrará incluso sin jugar, si Talleres no vence a Huracán este viernes, en Parque Patricios. Pero más allá del título, confesó que"realmente mi gran sueño es que los hinchas del equipo que esté dirigiendo llenen el estadio. Y ver una y otra vez el Monumental lleno, con la gente feliz, disfrutado de cómo juega River, me hace sentir pleno”.

El técnico riverplatense le da mucho valor al aprendizaje de cada momento de su nueva carrera: "Yo utilizo una frase desde que llegué a River: nosotros ganamos, empatamos o aprendemos. Y está claro que cada derrota nos hizo tomar nota de esas experiencias. Y nos fuimos haciendo más fuertes. Incluso la derrota con Barracas fue un llamado de atención y de respeto hacia el deporte, ¿no?, porque el deporte te puede golpear en cualquier momento si bajás un poquito tu grado de tensión competitiva".

En charla con La Nación, Demichelis no dudó en afirmar que "dimos un golpe sobre la mesa: River es el mejor equipo del fútbol argentino. Estamos por coronar un lindo objetivo que construimos desde hace siete meses y hay que estar concentrados. Ojalá sea el sábado con nuestra gente".

El técnico riverplatense se calificó como alguien con "tripa", más que con "testosterona", porque el destino lo llevó, por ejemplo, a perder a su madre cuando apenas tenía 15 años. En ese sentido dijo que "nada me resultó fácil en la vida. Soy un tipo que atravesó muchas adversidades, muy rudo por haber vivido tantas desgracias en mis 42 años. Pero por otro lado sé que soy muy sensible. Estoy lleno de emociones por estos días. El esfuerzo familiar y de mis antepasados, que son los primeros que se me vienen a la cabeza”. 

Los DT's que lo marcaron

En cuanto a los maestros que lo marcaron para ser el que es hoy, en primer lugar señaló a Ramón Díaz, que "me dio la posibilidad de iniciarme en el fútbol profesional. Ramón miraba por la ventana mientras caían los rayos y decía ‘en dos minutos sale el sol’. Y el sol salía. Con esa simpatía que hacía las cosas te convencía de que íbamos a ser campeones". 

 

 

Y agregó en la lista a Louis Van Gaal: "Me marcó muchísimo, me abrió la cabeza desde el sentido del pase, la posesión y cómo progresar en el juego. Desde la pelota, todo. En el año y medio que lo tuve de entrenador no hicimos ni un ejercicio que no incluyera la pelota. A partir de él empecé a interiorizarme de muchos más conceptos alrededor de la posesión, a mirar mucho más el Barcelona de Pep, quien es hoy, sin haberlo tenido como jugador, a quien más admiro".

 

 

Pero también guarda reconocimiento para alguien que tal vez está en la vereda opuestade Guardiola, Diego Simeone: "Un líder con todas las letras, un poder de convencimiento… uffff, madre mía. Otra manera de dominar los partidos, porque él también los domina sin la posesión". 

Hablando de su propia "marca registrada" como DT, explicó que "a través de mi filosofía futbolística -no te digo imitando a Guardiola porque eso no se puede hacer- intento tener un equipo dominador, con mucha tenencia de pelota. Divirtiéndonos con la pelota como vehículo". 

 

 

Una preparación exigente

Tras hacer la licencia en España e Italia, Demichelis puso en práctica todo lo aprendido "en esos 4 años que estuve en Bayern Munich. Todo lo que estaba en mi laboratorio de entrenador lo pude poner en práctica en un club que no regala la capacitación. La exigencia es diaria. Me controlaban la manera de llevar adelante los ejercicios, los entrenamientos, tenía que fundamentar todo desde la A hasta la Z, de lunes a viernes, y después de los partidos presentar análisis".

Fanático del golf y sin redes sociales, Micho reconoció que en vez de mirar una película o una serie prefiere analizar partidos para después aplicarlo en su profesión. "River tiene un espíritu obsesivo por tener la pelota. Soy un convencido de mis principios futbolísticos porque los investigué, los analicé, los estudié, pasé exámenes y los puse en práctica en el Bayern Munich. Estoy muy convencido de ellos. Los entrenadores no podemos tener un principio el lunes, y si perdiste el fin de semana, al lunes siguiente pasar a los principios contrarios", concluyó.