Menotti vs. Bilardo: la única vez que se enfrentaron como futbolistas

EL DOMINGO 2 DE MAYO DE 1965 se produjo un hecho que en su momento pasó desapercibido, pero que el paso del tiempo le dio otra dimensión.

Antes de que la patria futbolera se dividiera en el antagonismo bilardismo vs. menottismo, dos corrientes opuestas, Carlos Salvador Bilardo y César Luis Menotti se enfrentaron en 1965, en un empate 2-2 entre Estudiantes y Boca, en el estadio de 1 y 57, con una cancha a tope y una recaudación de casi tres millones de pesos.

Fue el único partido entre el Narigón y el Flaco como futbolistas. Todavía faltaban años para la llegada de ambos a la Selección Argentina y el nacimiento de una grieta que solamente profundizó sus diferencias irreconciliables. 

 
El partido terminó 2-2 tras la ventaja inicial de Boca por 2-0 con goles de Alfredo Rojas (20’) y Angel Clemente Rojas (35’), pero Estudiantes lo empató con tantos de Marcos Conigliaro (39’) y Juan Ramón Verón (50’), el padre de la Brujita.

Estudiantes formó con Poletti; Miguel Angel López y Barale; Castillo, Madero y Cheves; Bilardo, Roberto Santiago, Conigliaro, Eduardo Flores y Juan Ramón Verón.

Boca, dirigido por Néstor Rossi, lo hizo con Roma; Silvero y Marzolini; Simeone, Rattín y Sacchi; Pianetti, Menotti, Alfredo Rojas, Angel Clemente Rojas y Alberto González.

El árbitro fue Humberto Dellacasa y el partido correspondió a la cuarta fecha del Torneo Metropolitano, que Boca le arrebató a River en la recta final. 

"El once local mereció la victoria. Por mejor trabajo en equipo, mejor en planificación y ejecución y por superioridad en situaciones de gol", consignó la crónica de la época de El Gráfico, con menciones a la pasada del juego de cada uno. 

Sobre el Narigón: "El desmarque fluido de Conigliaro más la presencia de Bilardo en posición de puntero retenía en sus últimas posiciones defensivas al binomio más importante de Boca en cuanto a creación y transmisión de fútbol".

Sobre el Flaco: "Cabe admitir que la fórmula Menotti-Rojas grande-Rojas chico tiene que funcionar. Hay un grandote que las pelea todas, que choca fuerte cabecea bien. Un pibe que apila y saca gente. Un lungo que le pega maravillosamente y puede romper los palos desde 25-35 metros. De esa aparente heterogeneidad de estilos y temperamentos suele surgir en fútbol la homogeneidad de un provechoso juego ofensivo".

Tanto Bilardo como Menotti recibieron un 5 en la síntesis del partido, catalogado como "Bueno".

 
Bilardo, con 26 años, ya se había recibido de médico y disputaba su primera temporada con la camiseta de Estudiantes, a donde había llegado procedente de Deportivo Español luego de debutar en San Lorenzo. Jugaba de mediocampista por la derecha y entre sus atributos se destacaban la dinámica, el sacrificio y el ida y vuelta.

Aquel plantel del Pincha sería la base del que viviría la época dorada del club años después y, además de cortar con la hegemonía de los grandes en el fútbol argentino, conquistaría 3 Copa Libertadores de manera consecutiva (1968, 1969 y 1970) y una Copa Intercontinental, en Old Trafford ante Manchester United, de la mano de Osvaldo Zubeldía.  

Menotti, siete meses menor que Bilardo, llegó a Boca a principios de 1965 desde Racing, luego de iniciar su carrera en Rosario Central. Supo ser  un volante fino, talentoso y con poca vocación para la marca.

Tan cerca y tan lejos, Menotti comenzó su carrera como entrenador en 1970, fue campeón en el inolvidable Huracán de 1973 y al año siguiente asumió en la Selección Argentina, donde 4 años después conseguiría la primera estrella con la conquista del Mundial 1978.

Bilardo, en tanto, se lanzó como entrenador en 1970, ganó con Estudiantes el Metropolitano 1982 y en 1983 llegó a la Selección Argentina, en donde fue campeón del Mundial de México 1986. 

El único enfrentamiento entre ambos como entrenadores data del Torneo Apertura 1996, cuando la enemistad ya estaba muy marcada. El Independiente del Flaco derrotó 1-0 a. Boca del Narigón en La Bombonera con un gol de Francisco Guerrero.

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ARCHIVO: JULIÁN MARCEL