Las Crónicas de El Gráfico

1986. Monólogo de Bilardo antes de Inglaterra

Había que pasar la primera ronda y se la pasó, primeros. Había que eliminar a Uruguay, se logró. El Gráfico se encuentra en Puebla con el técnico argentino: Bilardo ¿Esto como sigue?

Por Redacción EG ·

30 de mayo de 2018
Imagen


Bilardo ¿esto como sigue?

Después de la conferencia de prensa pasó al estudio de televisión. Le pidieron un par de minutos para solucionar un problema técnico. Por esas vueltas del destino el técnico y el periodista quedaron a solas en un rincón. La pregunta estaba en la mirada, Carlos Bilardo la agarró al vuelo, pensó, y en una libreta de apuntes fue creciendo este monólogo:

"Mi destino es ganar así, con los que te dije en la boca. Me pasó como jugador, como técnico, en Estudiantes, ahora en la Selección. Todavía no puedo creer la cantidad de goles que nos perdimos, era para una goleada y terminamos esperando la hora porque ellos se vinieron encima. Pero en el balance general estoy contento, Argentina jugó mejor, tuvo más posibilidades que Uruguay, eso no lo puede discutir nadie. . . Cuando terminó el partido, esperé a todos los jugadores en la puerta del vestuario y los felicité. Este no era un partido común. Jugar contra los uruguayos en un Mundial tiene algo especial. La tensión venía de Buenos Aires, yo me daba cuenta porque los jugadores hablaban por teléfono con sus familiares y escuchaban lo mismo: "¡A Uruguay hay que ganarle!". Eso para siempre, es lo mismo que Argentina-Brasil o Uruguay-Brasil, son partidos muy difíciles porque aparece toda la historia.

Anoche dormí un montón, de la una de la mañana hasta las siete de hoy, ¿Por qué voy a estar nervioso? Algunos decían que Argentina no podía pasar la primera fase y resulta que ya estamos en los cuartos de final. No, no le contesto a nadie, lo digo. . .Yo siempre fui de agachar la cabeza y darle para adelante. ¿Se acuerdan cuando decía que necesitaba encerrarme cuarenta días con los jugadores? Bueno, aquí está la prueba. El equipo cada día juega mejor, es muy difícil sorprenderlo. Todo el mundo está concentrado en lo que hace.

El plan es volver enseguida a la concentración del América y ver los dos partidos del Distrito Federal, el martes Italia-Francia y el miércoles Paraguay-Inglaterra. Hay que ver todo y especialmente el segundo porque de allí saldrá el próximo rival. Te repito lo que dije  la semana pasada: el que elige, pierde. Nosotros podemos conocer mejor a los paraguayos, porque son vecinos porque los enfrentamos más seguido, pero aquí manda el destino. Si nos toca Inglaterra, habrá que prepararse y jugar. Para ganar hay que jugar contra todos los estilos. Dije ganar a propósito, es lo que quiere el equipo desde el primer minuto de cada partido. Hoy se volvió a ratificar. Metimos el primero y se siguió buscando. Esa media hora inicial del segundo tiempo tuvo calidad, como en el primer tiempo con Italia. Deben ser los mejores momentos de Argentina en el Mundial.

Recién, en la conferencia de prensa, alguien me preguntó qué podría pasar con Inglaterra, teniendo en cuenta la guerra de las Malvinas. Le contesté que nosotros no pensamos en eso. Mezclar el futbol con aquella guerra sería una falta de respeto a nuestros muertos que están enterrados en las islas. Si nos toca Inglaterra, va a ser un simple partido de futbol. Ya jugó Boca con el Aston Villa por la Copa Gamper en Barcelona, después Independiente le ganó al Liverpool por la Intercontinental. El fútbol es una cosa, el problema de las Malvinas otra, cada cosa va por separado.

 Yo nunca destaco a un jugador en especial, pero como ejemplo para los pibes, los que recién empiezan, voy a decir dos palabras de Maradona: es un crack y está jugando para el equipo, es un crack y entrena y concentra como si fuera uno del montón. No lo digo por Maradona, quiero que esto lo lean esos pibes que sueñan con llegar a una primera. Nada se consigue sin sacrificio. Vale para Maradona o para Juancito Pérez. . .”

Le dijeron que todo estaba preparado. Se ajustó la corbata, se despidió con un gesto, el guiño final se podía interpretar de una sola manera: "Mi destino es ganar así".

 NATALIO GORIN (Puebla-1978)