Las Entrevistas de El Gráfico

LUCIANA RUBINSKA: “A COCO BASILE LE DEBO MUCHO”

Se convirtió en una de las referencias en el periodismo deportivo y general. Cálida, auténtica, enérgica, El Gráfico se dio el gusto de charlar con una mujer que es referencia para sus pares.

Por Pablo Bomarito ·

15 de enero de 2022

ES UNA DE LAS CARAS Y LAS VOCES que la gente busca en "la tele" para informarse, para acompañarse... Siempre con una sonrisa, el tono justo para contarte las novedades de tu equipo preferido o para sumergirse en la actualidad más dura. Luciana Rubinska construyó una carrera brillante, sólida, venciendo prejuicios y forjando un estilo que sirve de guía para las nuevas generaciones de periodistas. Pero como en muchas historias siempre hay un punto de quiebre, un momento en el que los planetas se alinean y conspiran a favor.

El espaldarazo

“Estaba en TyC Sports y en un momento empezaron a recortar, a echar gente. Me cruzo a Basile en un restaurante y me dice '¿y rusa a vos te rajan no?'. Me parece que sí, le respondí. 'Si precisas algo llamame', me dijo. En ese momento estaba re angustiada  y pensaba que podía hacer hasta el último día, demostrar que era valiosa en mi trabajo”, recordó Rubinska.

Durante mucho tiempo Luciana montó guardia en la puerta de La Raya, el restaurante donde Basile y sus amigos se juntaban a comer los jueves a la noche. Más allá de la insistencia y la buena onda del “Coco”, la puerta era el límite. “No lo dudé y lo llamé, contándole la idea que tenía de hacerle la nota en La Raya con sus amigos, y él entendió todo. Me dio la nota, fue muy buena, muy linda, además de permitirme sentir que estaba dejando todo y que me la merecía por mi constancia, fue una nota con mucha repercusión. La levantó Olé, fue tapa y nota central, Mariano Closs también en la radio había elogiado la nota”, contó.

En ese momento más allá de la nota con Alfo Basile aparecen otros nombres que Luciana suma a ese espaldarazo. “Marcelo Palacios, a quien quiero muchísimo, también fue clave junto a Gastón Recondo, que estoy segura que también intercedió. Fueron los que hicieron fuerza para que pudiera continuar en TyC, los recuerdo y les agradezco", rememora.

Herencia Bohemia


Luciana se reconoce hincha de Atlanta, como lo fue su padre, y los primeros contactos con el mundo de la pelota arrancaron por amor a la camiseta: “Empecé a seguirlo, me acuerdo de ser chica y amigos del colegio se juntaban a ver partidos de la selección y yo los miraba siempre, me juntaba con ellos. En ese momento las mujeres en esta cuestión de mandatos y sistemas culturales que hoy se quedaron atrás, muchas no miraban. Entonces era medio un bicho raro y a mi me gustaba, me gustaba el juego. El básquet también, la etapa de Milanesio y Campana, en esa época iba a un club que se llamaba nautico Bouchard, que tenia buen basquet bueno y lo seguíamos con mi viejo”. 
Imagen En ESPN es parte del programa de debate "Equipo F" y F12 todos los mediodías..
En ESPN es parte del programa de debate "Equipo F" y F12 todos los mediodías..
Independientemente del deporte, estaba latente el gen de la comunicación como una profecía autocumplida. “Mi tía María a la que adoro siempre me dice que cuando era muy chica le decía que iba a ser periodista, de lo cual no me acuerdo… pero ya de adolescente, me iba a dormir y me imaginaba en la tele dando noticias, no se si era un deseo, se me metió en la cabeza. Como si esa imagen representara lo que después me paso”, expresó.

-¿Ćuando le dijiste a tu mamá que querias estudiar periodismo deportivo, que te dijo?

-El otro día hablando con unos amigos, estábamos criticando a nuestros padres y uno siempre tiene para criticarles -nos va a pasar con nuestros hijos- y un amigo mío, me decía yo quería ir a jugar al fútbol y a mí no me llevaban y se lo reclamé toda la vida porque yo quería ser jugador. Se me vino a la cabeza que mi mamá tampoco me apoyaba en lo que yo quería hacer y lo que quería estudiar y a lo que me quería dedicar. Ahí me rebelé. En ese sentido no tengo nada para reclamarle. Yo siempre me rebelé y siempre luché por lo que quería, por lo que me gustaba, por lo que soñaba o lo que deseaba en el momento. Me parece que un poco esa característica en mi personalidad forjó mi carrera profesional.

Más allá de la pelota

-¿Cómo fue el paso del deporte al interés general, a la política, te costó?

-No me costó porque lo anhelé, cuando empecé en C5N, uno de mis objetivos era en algún momento alejarme con columnista de deportes y empezar a hablar y hacer periodismo en general, hacer política. Pero digo general como conductora, En el momento que decido ir a C5N ya tenía planificado porque iba ahi y cual era mi búsqueda. No fue azarosa, fue un criterio clave. Al principio, como todo, nervios, temores... es un cambio no es lo mismo. Empezas a hablar de otros temas en donde se juegan otras cosas, donde hay otras miradas y otros intereses, que tienen otro vértigo también distinto. Lo bueno es que lo fui haciendo de a poco, dando pasito a pasito. Entonces eso me ayudó a tomar confianza. Cuando tuve la oportunidad estaba preparada.

Imagen El salto al periodismo general, un deseo cumplido.
El salto al periodismo general, un deseo cumplido.
 

-Ya tenes edad y recorrido para ser referente... ¿lo sentís así?

-Ay qué fuerte…yo siento que hice un aporte para el progreso de las mujeres dentro del periodismo deportivo y siento que si, que algo aporté. Que fui construyendo un camino, hay un colectivo y desde ese lugar me siento parte. Porque hay contextos, hay momentos que también empujan a que haya más mujeres dentro del periodismo deportivo, hoy se está dando así. Pero cuando me dicen algo en relación a ese lugar me enorgullece tremendamente. Agustina Larocca que es compañera mía en ESPN, cuando nos cruzamos en San Juan me dijo algo así, siendo ella una periodista conocida en el medio y ya teniendo cierto protagonismo en la cadena, y para mí es un orgullo tan grande, tan lindo, tan genuino. Que me emociono cuando me pasan esas cosas”.

Imagen Luciana, una cara habitual en los partidos importantes del fútbol Argentino
Luciana, una cara habitual en los partidos importantes del fútbol Argentino
-Una bendición colateral porque uno busca hacer su carrera sin intentar influir en la vida de alguien, pero cuando lo hace es un beneficio extra, es un bonus que está bueno tenerlo.

-Sí, pero además nosotros hacemos periodismo, hay algo que queremos modificar, cuando uno cuenta, elige qué contar, cómo contarlo, para que contarlo, etc. Al mismo tiempo, si bien es secundario, es cierto, es como un plus. Ahí hay una retroalimentación”.

-¿Cuál fue el peor momento que te tocó al aire, la peor descalificación que sufriste como periodista?

-Estaba en C5N como columnista de deportes y salió al aire Hugo Gatti erte y dijo algo como -si sos mujer tenes que ir a lavar los platos- Yo le contesté que por suerte mucha gente no piensaba como el y que fue una decepción, porque usted arrancó en Atlanta y en su momento la tapa de El Gráfico fue “Un desconocido que vale millones” y era Gatti que era pretendido por Boca”.

Imagen La Tapa del 30 de enero de 1963: Hugo Gatti, desconocido que vale millones.
La Tapa del 30 de enero de 1963: Hugo Gatti, desconocido que vale millones.
-Con el tiempo uno se tiene que ir deshaciendo de las cosas, porque si no, no tiene lugar. ¿En tu carrera de qué te deciciste y que adquiriste? Qué es lo que más te costó dejar y lo que menos te costó y lo que más te costó adquirir?

-Me costó dejar este lugar un poco marcado por los prejuicios y demás, que solo tenía que hacer periodismo y hablar de fútbol y cuanto más hable de táctica mejor. Entender que yo de todas maneras soy eso y mucho más que eso, tengo otras aristas. Yo salía muy tapada, no me preocupaba por otras cuestiones más frívolas, que hacen a la cuestión.  Estuve muchos años en esa postura y con el tiempo aprendí que la vida no pasa por eso, y que tengo que hacer lo que me haga sentir bien, lo que  me gusta. Verme bien, también está bien, en mi o cualquiera. Lo que adquirí fue oficio, muchos años al aire… El oficio solamente se adquiere ejerciéndolo.

-Si tuvieras la chance de poder viajar en el tiempo, a un momento de tu historia que quieras, ¿Qué te dirías?

-Me diría que no claudique , que nunca claudique  siempre lo que me movilizó me apasionó y me impulsó. sea el motor de mi vida. Yo no padecí mi carrera, al contrario, lo disfruté. Me acuerdo de momentos que alguien quiso trabarme o perjudicarme, no hay que quedarse ahí  y seguir intentándolo, no hay que claudicar nunca.

FOTOS: IG @lucianarubinska