¡Habla memoria!

1965. Platense vuelve a Primera.

“Ya no hay más sábados para Platense”, tituló Osvaldo Ardizzone, quien con una crónica detallada recrea el partido consagratorio en la victoria frente a All Boys por 2 a 1.

Por Redacción EG ·

25 de abril de 2019

Gran clima previo. En la calle, en las boleterías, en las puertas de acceso. Un clima que luego se metió en el estadio y que se mantuvo en la misma intensidad nerviosa y emotiva a lo largo de los 90 minutos y que se prolongó a la hora de los festejos. Una pintura desusada para un encuentro de esta categoría. Por la puja de las tribunas y por el gran aporte popular, que dejó una taquilla superior a los 4.000.000 de pesos.

 

Imagen 14 minutos del segundo tiempo. Momento en que la cabeza de Guzmán va a consumar el derecho al ascenso. Bertoni quedó a media agua. Bettinotti sin poder intervenir. ¡Gol de Platense!
14 minutos del segundo tiempo. Momento en que la cabeza de Guzmán va a consumar el derecho al ascenso. Bertoni quedó a media agua. Bettinotti sin poder intervenir. ¡Gol de Platense!
 

Y dentro del campo la misma carga nerviosa y emotiva. Los 22 hombres con la misma trascendente responsabilidad. Más vigor que preocupación técnica. Más esfuerzo que planes. Sin tiempo para meditar las maniobras. Se corrió, se peleó la pelota, y sin embargo no se desembocó nunca en la intervención excesivamente fuerte ni menos mal intencionada. Y lo más notable fue la común despreocupación en los dos equipos por esquemas rígidamente defensivos. All Boys, que "tenía el derecho" de especular con el empate conforme a su punto de ventaja, fue el más generoso en la lucha. Fue el equipo que más se proyectó en la ofensiva. Con más gente. Con la gente que tácticamente debió mantener en una posición más conservadora, hasta quizá más responsable, teniendo en cuenta esa ventaja y en especial lo definitivo del resultado. Ali Boys no estaba jugando un partido más. Estaba disputando un campeonato. Un ascenso que no tenía más tramite que esos noventa minutos. Y llevaba un punto de ventaja.

 

Imagen Platense, compañero de Lanús en los domingos de 1965. De izquierda a derecha: Medina, Rojas, Scardulla, Topini, Romani, Murúa. Agachados: Guzmán, Togneri, Miranda, Garro y Senés.
Platense, compañero de Lanús en los domingos de 1965. De izquierda a derecha: Medina, Rojas, Scardulla, Topini, Romani, Murúa. Agachados: Guzmán, Togneri, Miranda, Garro y Senés.
 

El "todo o nada" era nada más que para Platense. Que necesariamente tenía que ganar para clasificarse. Y sin embargo fueron los de Núñez los que más especularon en el campo. Seguramente conociendo las características del rival. Explotando el temperamento ofensivo de Paladino, que va y va siempre al ataque, a buscar el gol, a provocar la pared, a esperar la devolución. Y dejando un enorme terreno a sus espaldas. All Boys fue más equipo que Platense. Mantuvo la iniciativa y el control de la pelota a lo largo de todo el encuentro. Forzó más la ofensiva. Llegó más. Pero la llegada al gol fue con poca higiene. Faltó el claro para definir. Pocas rotaciones. Pocos cambios de frente. Más esfuerzo individual que trabajo asociado. Fue una ofensiva dura, sostenida, vigorosa, que normalmente finalizó en el rebote o en el choque. Y en los 20 minutos finales, cuando buscó desesperadamente el empate, que era la posibilidad del campeonato, mostró más aún todas esas imperfecciones. Dispusieron de tres oportunidades de gol, por la vía del centro a la aglomeración. Siempre en jugada enredada. Con embestida. Buscando la oportunidad de un cabezazo bien ubicado.

TOPINI EN LA GRAN NOCHE

Y se encontraron con un arquero que poco a poco se fue agrandando, hasta convertirse en la figura del campo. En el principal "responsable" de la victoria de su equipo. Gran actuación. Detuvo dos pelotas que se gritaron antes. Un cabezazo metido por Carro en el rincón derecho y abajo. Y otra pelota que detuvo sobre la raya, tomado a mitad de camino, con gran sentido de recuperación. No muestra mucha capacidad en las salidas. Pero si una gran reserva física para volver a armarse.

 

Imagen Topini: La figura de la noche. Garra metió un zurdazo paralelo a la raya de gol que se metió entre Bertoni y su primer palo. Primera ventaja de Platense.
Topini: La figura de la noche. Garra metió un zurdazo paralelo a la raya de gol que se metió entre Bertoni y su primer palo. Primera ventaja de Platense.
 

EN CAMBIO, BERTONI...

Fue la contrafigura de su colega. El segundo gol, el gol que se llevó el campeonato, fue imputable a su falta de distancia y de resolución para la salida. Fue una responsabilidad que se divide entre él y Bettinotti. Esa pelota que llegó bombeada y medio pasada desde la derecha aterrizó en el área chica. A un par de metros de Bertoni. Sólo quedaba un solo hombre para el remate. Y ése fue Guzmán, el autor del tanto. Faltó el cierre de Bettinotti. Pero entre la opción de un delantero con la cabeza y la de un arquero con las manos no hay alternativa. Es siempre pelota del arquero.

No le hacemos ninguna crítica en el primer tanto que consiguió Garro. Admitimos que para enfrentar a un delantero que llega al fondo con pierna zurda hay que dar el paso adelante para ir al corte. El disparo que sacó Garro está fuera de todas las posibilidades lógicas. Y según algunos jugadores de All Boys, la pelota salió "pifiada". Pero en el gol decisivo sí lo hacemos responsable.

LAS DIFERENCIAS Y EL RESULTADO

Los dos mejores jugadores de la noche los tuvo Platense. Togneri, el N° 8, y Topini. El arquero ya está elogiado. Togneri fue el único hombre, junto con Crispo en All Boys, y Garro, en la primera etapa, que trató de jugar la pelota con la cabeza arriba. Fue el jugador más importante en la media cancha. Porque la supo caminar, porque se paró bien para la recepción y siempre trató de aquietar el ritmo. En All Boys no hay nadie que sepa hacerlo con capacidad. Y era All Boys justamente el equipo que más necesitaba "dormir" la pelota en el medio juego. Pero ni Paladino ni Bejarano están para ese trabajo. A los dos les gusta la pelota y a los dos les gusta caminar mucho con ella.

El resultado no tiene nada que ver con el trámite. Está en Topini principalmente. El gol de Platense que decidió la noche fue el error de Bertoni. Hasta esos "trágicos" 14 minutos para All Boys, Platense no había siquiera pasado la media cancha.

No les reprochamos a los de Floresta su tendencia ofensiva. Si la falta de planes para disputar una final de campeonato. Dar ventajas es ingenuidad. Y All Boys dio ventajas.

 

Imagen FOTO INÉDITA. Directamente del archivo, esta foto retrata el momento inmediato a la finalización del encuentro. Euforia total, Platense ya es de Primera.
FOTO INÉDITA. Directamente del archivo, esta foto retrata el momento inmediato a la finalización del encuentro. Euforia total, Platense ya es de Primera.
 

Platense 2 vs All Boys 1

Jugado en San Lorenzo de Almagro

Arbitro: Aurelio Bosolino.

Platense: E. J. Topini; Horacio Medina y J. C. Murúa; J. L. Romani, T. Scardulla y A. Rojas; 0. Guzmán, R. Togneri, J. H. Miranda, O. V. Garro (capitán) y E. Senés. Guardavalla suplente, J. C. Hurt.

Director técnico, Antonio Faldutti.

All Boys: J. C. Bertoni; E. V. Batagelj y E. Grispo; R. C. Bettinotti, J. A. Paladino y R. M. Rodríguez (capitán); O. T. Canadel, A. Bejarano, Pedro Medina, H. M. Carro y Luís Medina. Guardavalla suplente, R. Borsani.

Director técnico, Mario Boyé.

Primer tiempo: 7 minutos, Garro (P); 13, Carro (AB).

Segundo tiempo: 18 minutos, Guzmán (P).

Recaudación: $ 4.014.230, incluso plateas.

 

 

Imagen Final. Vuelta olímpica. Medina, ya sin casaca, junto a Garro, al frente. Todavía quedó una reserva de energías para seguir corriendo. Y sonriendo...
Final. Vuelta olímpica. Medina, ya sin casaca, junto a Garro, al frente. Todavía quedó una reserva de energías para seguir corriendo. Y sonriendo...
 

COMO VEMOS AL ASCENDIDO

Después de 9 campeonatos Platense vuelve a la primera División "A". Nota simpática para todos. Esfuerzo y recompensa que llega después de muchos años de "pelear" el ascenso, que siempre constituye un acontecimiento en la vida de la institución. Pero en el otro aspecto, en la capacidad de equipo, trasplantado a la primera categoría, ya debe ser una preocupación. Transmite excesiva modestia en valores humanos. Por ahora es nada más que la medida de un torneo de menor jerarquía. Mirando el futuro, imaginándolo en la confrontación con equipos de primera "A", debe preocupar a quienes rigen sus destinos. No nos atrevemos a opinar sobre una selección de los valores actuales. No nos animamos a opinar sobre quiénes pue-den quedar y quiénes deben ser reemplazados. Pero la fisonomía, la estructura total del equipo no asegura nada. O en todo caso muy poco. Nos adherimos a la simpática corriente que provoca su reincorporación al círculo privilegiado. En el otro aspecto pensamos distinto.

 

Imagen Morelli, Murúa, Topini, Garro y Romani celebran bajo las duchas.
Morelli, Murúa, Topini, Garro y Romani celebran bajo las duchas.
 

LOS ONCE

Enrique José Topini. Nació en Bahía Blanca el 10 de mayo de 1938. Se inició en el Club Olimpo de la ciudad natal y en 1959 ingresó a Platense. Admira a Carrizo. 1.76 m. y 81 hilos. Casado, sin hijos.

Horacio Esteban Medina. Nació en La Falda, Córdoba, el 15 de julio de 1934. Jugó en los equipos Presidente Roca y Lavalle. Está en Platense desde 1959. Casado, dos hijos. 1.72 y 74 kilos. Cree en Navarro.

 

Imagen FOTO INÉDITA. Del archivo de El Gráfico. Después de 8 años de jugar en el ascenso, Platense volvía a la Primera.
FOTO INÉDITA. Del archivo de El Gráfico. Después de 8 años de jugar en el ascenso, Platense volvía a la Primera.
 

Juan Carlos Murúa. Nació en Posadas, Misiones, el 17 de julio de 1935. Se inició en la sexta de Racing. En 1962-63 jugó en Argentinos y en 1964 pasó a Platense. Casado, un hijo. 1.78 y 74 kilos. Hincha de Vairo.

Juan Luis Romani. Nació en Arocena, Santa Fe, el 19 de agosto de 1935. Jugó en Colón, más tarde en Unión (dos años) y Argentinos Juniors. Ingresó a Platense en 1964. Soltero. 1.78 y 75 kilos. ¿Un defensa? Marzolini.

Héctor Scardulla. Nació en Luján, Bue-nos Aires, el 23 de abril de 1938. Comenzó en Racing (1954) y jugó seis partidos en el campeón de 1961. 1.74 y 69 kilos. En Platense desde 1964. Soltero. Cree en Federico Sacchi.

Alberto Rojas. Nació en Salta el 15 de noviembre de 1938. Integró el Sportivo Anzoátegui de su provincia y juega en Platense desde 1959. Casado, un hijo 1.73 y 73 kilos. ¿Un gran jugador? Sacchi.

Olindo Guzmán. Nació en Córdoba el 29 de mayo de 1944. Defendió al club Las Flores de la primera B cordobesa. Una temporada en Platense. Soltero. 1.70 y 70 kilos. "El mejor delantero argentino es Ermindo Onega".

Néstor Togneri. Nació en San Martín, Buenos Aíres, el 27 de noviembre de 1942. Se inició en la tercera de Platense en 1961. Debutó en primera contra magro (segunda rueda 1964). 1.75 y kilos. Soltero. Hincha de Rendo.

Jorge Héctor Miranda. Nació en Constitución, Capital Federal, el 5 de marzo de 1946. Se inició en Racing (1962) en la última temporada pasó a Platense. 1.67 y 60 kilos. Soltero. Admira a Menéndez. Quedará en Platense.

 

Imagen La alegría de Miranda estalla en un beso a Scardulla.
La alegría de Miranda estalla en un beso a Scardulla.
 

Orlando Vicente Garro. Nació en Mendoza el 20 de junio de 1938. Jugó en Godoy Cruz, Independiente (campeón 1960) y Universidad Técnica (Chile). Platense desde 1962. Casado, un hijo. 1.72 y 72 kilos. Hincha de Onega.

Eduardo Raúl Senés. Nació en Formosa el 1' de octubre de 1937. Jugó en Patria (Formosa), Boca Juniors, Luján (Mendoza), San Telmo y Barracas Central.  Dos temporadas en Platense. Casado, hijos. 1.72 y 67 kilos. ¿Un delantero? Félix Loustau

 

Imagen FOTO INÉDITA. Del archivo de El Gráfico, el vestuario de Platense que festeja la vuelta a Primera División.
FOTO INÉDITA. Del archivo de El Gráfico, el vestuario de Platense que festeja la vuelta a Primera División.
 

Por Osvaldo Ardizzone.

Fotos: ALFIERI, GONZALEZ, PELLIZZERI

 

 

La cerveza del triunfo (150.000 pesos por cabeza)

Medrano y Rivadavia. Confitería "Las Violetas". Dos mesas grandes en el fondo, con el apuro de una celebración resuelta a último momento. Es la primera hora del miércoles. El saco blanco de Antonio Faldutti puede hacer pensar en un festejo descontado. No, no hay nada de eso: "All Boys jugó mejor... pero ganamos nosotros". Recuerda una frase del enigmático Helenio Herrera y la hace suya: "Si se juega lindo lo recuerdan por 24 horas y en cambio, aunque se juegue mal, los campeonatos quedan en la historia". Topini es el centro de la rueda. El "Gringo" es el hombre de la noche. "¿Cuál fue su mejor partido del año?" Duda. Bebe el segundo vaso de cerveza y responde: "Contra Villa Dálmine". Protestas. El zaguero Medina lleva la iniciativa: "¡No, Gringo!, no digas  eso.  Tu mejor  partido fue el de esta noche… Hoy te pasaste”. Topini reflexiona. Medina le sigue gritando: “el de esta noche, Gringo”. Y entonces accede: “Bueno, ponga el de esta noche”.

 

Imagen Faldutti (de píe) brinda con Senés, Rojas y Togneri.
Faldutti (de píe) brinda con Senés, Rojas y Togneri.
 

Las convicciones de Topini no tienen la misma firmeza que las manos de tenaza que cortaron el sueño de All Boys.

Nos reencontramos con Faldutti, de 36 años, bandeja de saladitos por medio. Es la segunda vez (Ferro en 1963) que asciende un equipo a Primera A. Nació en San Fernando. Fue jugador de las inferiores de Tigre y una triple fractura en la rodilla izquierda apuró su debut como técnico. Se inició en Sportivo Palermo y ahora levanta un brindis por su segundo gran halago en el profesionalismo. "Me hice cargo de Platense el 17 de agosto. Sólo satisfacciones quedan como saldo... Tal vez haya algo de milagro en el ascenso logrado, pero estos cuatro meses fueron de responsabilidad para todos. Los dirigentes me apoyaron totalmente y así se puede trabajar, se puede pelear". No tiene gorra a cuadros ni pipa curva. Trabaja de investigador... de "espía". Argentino Geronazzo completó el equipo técnico de Faldutti. "No puede haber nadie —puntualizó Faldutti-- que haga una radiografía del rival como la hace Geronazzo. Fue un hombre valioso, fundamental, para llegar a esto". Geronazzo sigue sonriendo... En la cabecera de la mesa está el presidente del club: Luis Jerónimo Brennan, 72 años, integrante del directorio de los ferrocarriles, profesor de la Universidad, liquidador de seguros de la Nación. "Hubo dos factores fundamentales para que Platense obtuviera el ascenso: Dios... y Faldutti. Soy profundamente católico y de ahí mi primer reconocimiento. Como hombre debo señalar que Faldutti ha sido una gran adquisición para el club". ¿Quedará en 1965? "Sí... no podemos dejarlo marchar". Juan Santiago, secretario general de Platense, recuerda el origen. "Un grupo de muchachos le apostó a un caballo, Gay Simmons, con la finalidad de hacer un pozo grande que diera para las camisetas y gastos mayores. Y Gay Simmons ganó... Era un defensor de las sedas del stud Platense y de ahí el nombre del club. Fue fundado el 25 de mayo de 1905 y la primera sede estuvo en Callao y Posadas". El señor Brennan, presidente por segunda vez, confiesa que hubo que hacer una colecta al margen (puse 2.500.000 pesos que ya he recuperado) para solventar los gastos del año. "¿Qué pasará en primera A?", le requerimos. El señor Brennan no se inmuta: "Platense está preparado. Deberemos unos 4.000.000 de pesos, pero eso no encierra preocupación mayor frente al patrimonio del club. Tenemos 22.500 socios y el respaldo es elocuente. Hemos tenido suerte con la venta de algunos jugadores, caso Morrone. En un primer momento la transferencia se hizo sobre la base de unos tres millones, pero en el instante de cobrar la diferencia cambiaría estiró la suma a ocho millones. Platense está preparado después de vivir nueve esperanzados años en la división B”. Brennan vuelve a insistir sobre el director técnico: "A él le debemos la estabilización del equipo y la disciplina que imperó en todo momento. Lo tomó después de cinco derrotas... y lo levantó en todo sentido".

 

Imagen La confitería "Las Violetas" se inunda con la euforia de Platense.
La confitería "Las Violetas" se inunda con la euforia de Platense.
 

Italo Ricardo Morelli, preparador físico, 45 años, dos hijos, fue otro de los llamados a último momento. "En Banfield (trabaja allí desde hace cinco años) encontré un grupo magnífico, pero este de Platense no se queda atrás... Me invitó Faldutti y no pude negarme. Es un momento inolvidable para todos".

Más cerveza. Más sandwiches. En la recatada confitería el bullicioso grupo forma una isla... bastante mojada. Lullo, Lacertosa y otros dirigentes se suman en las felicitaciones. La euforia comienza a apagarse. Ya pasó todo. Ahora se piensa en los domingos del año que comienza, en los 150.000 pesos limpios que cada uno de los jugadores recibirá por el triunfo ante All Boys. Y entonces nos situamos otra vez en el vestuario caliente, en el mar de abrazos, en el disloque emotivo que subrayó la conquista. Las lágrimas, los revolcones por el piso... el reencuentro de los dirigentes.

A treinta metros, en el otro vestuario, Mario Boyé dejaba que la ducha corriera mojada en un saludo al director técnico generosa. Todavía tenemos la manga de All Boys que encerró nuestro reconocimiento a un hidalgo vencido.

Platense ganó el ascenso. AII Boys lo arañó más que ninguno.

Los brindis nos devuelven a la esquina de Medrano y Rivadavia, A las dos de la mañana el grupo se retira en silencio. Etapa superada... Camino que se abre.

EL VECO