¡Habla memoria!

“Mis partidos contra Boca”, por Pinino Mas

En 1972, El Gráfico le propuso al ídolo de River hacer un repaso de su extenso historial de enfrentamientos que ha protagonizado frente a Boca, y en los que ha dejado una huella imborrable.

Por Redacción EG ·

31 de marzo de 2022
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En abril de 1964 ingresó al mundo del superclásico. Fue un amistoso, sin mayor trascendencia. Como el resultado: 0 - 0. Pero Oscar Mas iniciaba esa noche, en la punta izquierda de River Plate, un reinado inapelable.

Córdoba fue testigo de un debut meritorio. Ahora, a 8 años de aquella presentación, "Pinino", con sus electrizantes corridas por la punta izquierda es el símbolo de River frente al clásico choque con Boca Juniors. Un actor principalísimo de un espectáculo que jamás perderá vigencia. Y que en vísperas de reiterarse lo presenta como animador fundamental. Alegrías, sinsabores, anécdotas y goles van de la mano con Mas en el momento de recapitular tantas ediciones del superclásico.

"Mi primer River - Boca fue en abril del 64. Un miércoles a la noche, la semana anterior a la iniciación del campeonato oficial. Fue un cotejo amistoso, días después de haberse enfrentado por la Copa Jorge Newbery. Recuerdo que esa tarde perdimos 4 - O. Fernández Viola, el técnico por ese entonces, decidió mi inclusión el reemplazo de Lallana. Me dijo que jugara tranquilo, que confiaba plenamente en mí, como todos mis compañeros. Y esa noche jugué una barbaridad. Me marcaba Simeone y me salieron las cosas muy bien. Fui la primera vez que Valentín no nos hizo goles y, como detalle curioso, se suspendió el partido por falta de pelota. Además hubo expulsados, como Delem y Simeone."

Imagen Además de su talento, Oscar Mas es recordado por su bravura en Superclásicos "Mientras más me puteaban y me pegaban, más jugaba"
Además de su talento, Oscar Mas es recordado por su bravura en Superclásicos "Mientras más me puteaban y me pegaban, más jugaba"


"El partido con Boca es algo especial para el jugador. Por más que uno haya jugado muchas veces el clásico, en la semana del partido vive una tensión especial. Se advierte cierto nerviosismo que, le aclaro, al comenzar el partido desaparece. En general yo me caractericé en los partidos previos con Boca por la confianza y fe que tenía esperando la hora del encuentro. Una vez que jugué 10 ó 15 clásicos, reconozco que actué con más experiencia, pero la importancia del partido crea siempre una responsabilidad especial."

LOS PARTIDOS: “Desde que juego en la primera de River, salvo el 3 - 3 del año pasado, nunca salió un gran partido entre nosotros. Ese sí que fue un "partidazo". Aunque al final tenía una "mufa" bárbara por el punto que se nos escapó. También recuerdo, quizá porque fue el primer oficial, el del 64 en el Monumental, cuando expulsaron a Cap, Cubilla y Marzolini. Terminé jugando en la defensa y hasta saqué una pelota de chilena."

LOS GOLES: "Siempre tuve la suerte de hacerle goles a Boca. Además voy a jugar pensando que los hago. Recuerdo los dos que le marqué a Roma en el 66 en la "Bombonera"; o los dos del 70 por el Nacional; o el tiro libre a Sánchez en el 69, también por el Nacional; pero el más lindo fue por el Metropolitano de ese año, cuando en el Monumental le ganamos 2 - 0 y le sacamos el invicto. ¡Qué manera de gritar ese gol que permitió definir el partido. . .! Recibí de Tito Onega en un pase profundo. Arranqué en el pique sacándole a Suñé apreciable ventaja. Cuando salió un poco Roma le mandé el zurdazo con mucha puntería al palo opuesto. Lo grité con toda mi alma. Corrí una barbaridad. Casi más que en todo el partido. Me abracé con Angel, "Tito", el "chamaco", Ferreiro, en fin, todos..."

Imagen 1965. Oscar Mas es fotografiado en la previa de un Superclásico disputado el 4 de julio y que sería para Boca en un triunfo por 2 a 1.
1965. Oscar Mas es fotografiado en la previa de un Superclásico disputado el 4 de julio y que sería para Boca en un triunfo por 2 a 1.


EL HERMANO: "Cuando en el 66 me tocó enfrentar a Luis, que integró un equipo de emergencia de Boca, constituye otro recuerdo especialísimo. Él anduvo bien y nos costó bastante ganar. La semana previa al partido ni hablamos de fútbol en casa. Durante el partido no nos enfrentamos en ninguna jugada."

LAS HINCHADAS: "Con el público de River me siento compenetrado. Y con el de Boca nunca tuve inconvenientes. Me quiere mucho. Durante el partido, cuando la hinchada nuestra grita, parece que uno tuviese más aire y garra. Cuando lo hace la de Boca yo me agrando."

ANECDOTAS: "En tantos partidos, siempre surge algo risueño. Pero las que más recuerdo son con Roma y Rattín. Con Antonio, en el 66, cuando le ganamos 3 - 1 y le hice dos goles. En una jugada escapé a Simeone y le crucé el tiro al otro palo, desviándomelo con la punta de los dedos. Enseguida me comentó: ¿A papá...? Con el "rata" fue en la "bombonera". Saltamos a disputar una pelota y le gané. Me miró y comentó: ¿Este enano cabecea? También se quejan mucho cuando me cometen alguna falta y caigo espectacularmente."

LA PAREJA: "Contra Boca tuve dos compañeros que siempre me hicieron jugar una barbaridad. Fueron "Tito" Onega y Delem. Y ojo que no estoy menoscabando a los demás. Porque usted tiene jugadores como Ermindo que son fundamentales, pero frente a Boca, Delem y "Tito" me explotaban muy bien."

Imagen Mas engancha ante Rogel. El recordado wing izquierdo ha dejado su sello en Superclásicos anotando en 12 oportunidades.
Mas engancha ante Rogel. El recordado wing izquierdo ha dejado su sello en Superclásicos anotando en 12 oportunidades.


EL CLÁSICO Y SU SEÑORA: "Ahora Emma siempre me recuerda que me cuide las piernas. Pero habitualmente recordamos la alegría de ella cuando en el 66 le ganamos 3 - 1 a Boca y marqué dos goles. Sobre todo porque al otro día cumplía 15 años y fue un regalo bárbaro de cumpleaños."

AMARGURAS: "Como hincha, el día que Delem malogró el penal sufrí una gran decepción. Otra jornada poco feliz fue en el 69, cuando empatamos 2 - 2, en nuestra cancha, pero ellos salieron campeones. Pero en general ando parejo entre triunfos y derrotas."

LESIONES: "Sólo una vez me lesioné frente a Boca. Fue por la Copa Libertadores, en el 70. La noche que los eliminamos. Nicolau me golpeó a la altura de la pelvis. Tuve que salir porque no podía más. Después se dijeron muchas cosas de mí, pero no estaba en condiciones de seguir jugando. En general los partidos con Boca son fuertes, pero nos respetamos. Salvo que sea un caso muy especialísimo, como una final. Yo particularmente nunca lesioné a un rival y jamás me voy a quejar. No lloro cuando me dan."

LA CANCHA: "La "Bombonera" a mí me agrada. Allí me agrando y siempre voy a hacer goles y a vivirlos, como a mí me gusta. Es una gran satisfacción hacerle goles a Boca. En cualquier cancha. A propósito, si bien no tengo inhibiciones, considero que fuera de los campos habituales jugar con Boca en Racing es muy favorable para nosotros."

Imagen 1969. Mas arremete contra el arco defendido por Roma y es perseguido por toda la defensa xeneize en el triunfo de River por 2 a 1 por el Metropolitano.
1969. Mas arremete contra el arco defendido por Roma y es perseguido por toda la defensa xeneize en el triunfo de River por 2 a 1 por el Metropolitano.


MARCADORES: "Todos me jugaron lealmente. Estimo que el más capaz fue sin duda Rubén Suñé. También Simeone y Ovide me marcaron bien. Con relación a los arqueros, con Roma tenemos ya un duelo especial. Es muy lindo hacerle goles a Antonio."

Oscar Mas vive el clásico como aquella noche inolvidable en abril del 64, cuando Fernández Viola le dio la gran oportunidad. Lo juega con el fervor del hincha que el profesional no borró. Por eso cuando habla del clásico parece revivir todos los episodios inolvidables de su campaña.

"Uno tendrá experiencia, estará confiado en primera, hará goles, será ídolo, pero con Boca siempre el partido tiene algo especial. Quiera o no, los nervios aparecen y hasta que no empieza el partido uno tiene su preocupación. Por eso jugaré el clásico hasta que me den las piernas. ¡Qué lindo es jugar y ganarle a Boca!"

OSCAR MAS (El Gráfico -1972)

Imagen Mas intenta definir ante la salida de Antonio Roma. “En una jugada escapé a Simeone y le crucé el tiro al otro palo, desviándomelo con la punta de los dedos. Enseguida me comentó: ¡¿A papá...?!”
Mas intenta definir ante la salida de Antonio Roma. “En una jugada escapé a Simeone y le crucé el tiro al otro palo, desviándomelo con la punta de los dedos. Enseguida me comentó: ¡¿A papá...?!”