Las Fotos de El Gráfico

Pelé, con la camiseta de Boca dando la vuelta

En 1968, Santos ganó el pentagonal de Buenos Aires jugado junto a Boca, River, Nacional (U) y Benfica. O Rei se puso la de Rattin y fue ovacionado por toda la Bombonera.

Por Redacción EG ·

29 de diciembre de 2022

El domingo 25 de agosto de 1968 en cancha de Boca y dirigidos por Luis Pestarino, disputaron el partido final del pentagonal Ciudad de Buenos Aires el poderoso Santos de Pelé y Boca Juniors de Argentina. El encuentro no tuvo nada de amistoso, hubo cuatro expulsados y el empate favoreció al equipo brasilero que se consagró campeón.

Cuando terminó el partido, Pelé intercambió camisetas con Rattín y,después de la coronación, dio la vuelta con la azul y oro puesta, ante el aplauso y afecto del público argentino.

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Los fotógrafos de El Gráfico fueron: Alfieri, Carreño, Forte, Gemelli, Abaca, De la Iglesia y Pellizzeri.

Compartimos las palabras que le dedicó en El Gráfico Osvaldo Ardizzone a a este instante inolvidable:

¡HASTA SIEMPRE PELÉ!

Apenas unos minutos antes, cuando todavía Gilmar no apretaba la Copa, lo vimos con el gesto excitado. Lo oímos gritar con todas las fuerzas de esa fiebre ganadora que le corre por las venas. Con toda esa estirpe de jugador que nunca se conforma con la derrota, porque nació y se hizo a la escuela del triunfo… Ahora se terminó todo. Ahora la Copa es de Gilmar, la Copa es del Santos, la Copa es de Pelé. Ahora la gran sonrisa que aparece en todos los estadios del mundo y que conocen todos los pibes del mundo… Porque es la misma sonrisa. La hora feliz del pibe y el momento feliz del Maestro. Y así se explica su enorme grandeza, su larga vigencia, su interminable reinado. ¿Cómo es posible para un hombre de su fama, de sus éxitos, de su popularidad, pelear con tanta vehemencia por los resultados, festejar con tanta sonoridad los triunfos? Y en todo eso reside justamente el argumento de su grandeza. No hay partidos de compromiso. No hay tardes de brazos caídos. No hay pretextos de ausencia. Pelé es el que vimos en todo este Pentagonal. Ese que quiere ganar todos los partidos. Ese que pelea todos los partidos. Ese que jerarquiza todos los espectáculos. Ese que decora todos los estadios donde aparece su esfuerzo, donde aparece su talento… Ese que se olvida de su fama para transformarse en el más anónimo de los hombres del Santos. Ese que se va con los pibes en los hombros, con todos los pibes del mundo que tienen la misma sonrisa feliz del “Rey” cuando el “Rey” festeja… Ese que cambia la casaca con el “Rata” para incorporarla a su gran galería de trofeos…

Ahora, en la partida, no hay adiós… Con los viajeros como Pelé, con las troupes como el Santos, nunca hay adiós… Simple y afectuoso “Hasta la vuelta”… Hasta el próximo aplauso, hasta la próxima sonrisa de ese pibe que también estará esperando…