JUAN MANUEL CERÚNDOLO: "CHELA ME PUEDE APORTAR MUCHA INFORMACIÓN"
El zurdo de 20 años, que jugó una exhibición benéfica en Pilar con Nalbandian y Dulko, entre otros, contó por qué sumó al ex 15° del mundo a su equipo de trabajo y cuáles fueron los tres momentos clave de su temporada consagratoria.
Por Pablo Amalfitano ·
13 de diciembre de 2021
JUAN MANUEL CERÚNDOLO, sin dudas, configuró una de las revelaciones más grandes del tenis argentino en la temporada. El zurdo de 20 años englobó un año para el recuerdo: inició en el puesto 341 del ranking ATP y sus dos primeros torneos fueron en la primera línea profesional: dos M15, los ex Futures de 15 mil dólares en premios, en Antalya.
El ascenso, sin embargo, fue meteórico: ganó el Córdoba Open, contra todo pronóstico y desde la qualy, para avanzar a paso firme, consagrarse en tres Challengers (Roma, Como y Banja Luka), llegar a otras dos finales (Meerbusch y Lima) y establecerse entre los cien mejores con margen. Cerró la temporada en el puesto número 90, con la certeza de que arrancará el año en el cuadro principal del Abierto de Australia.
Ya relajado tras un año cansador y lleno de satisfacciones, y en plena pretemporada en cemento, el menor de los hermanos Cerúndolo participó de la Phenix Tennis Cup, en el Pilar Golf Club, un acontecimiento solidario que juntó a tenistas con polistas y otras figuras con el objetivo de recaudar fondos para UNICEF y para la fundación de David Nalbandian, uno de los íconos de la exhibición.
Después de cerrar la jornada con un partido de dobles junto con el polista Eduardo Novillo Astrada, frente a la pareja integrada por el periodista Alejandro Fantino y el humorista Martín Bossi, Juanma se hizo un rato para reflexionar con El Gráfico en relación a la mejor temporada de su vida, los momentos clave y la incorporación a su equipo de trabajo de Juan Ignacio Chela, uno de los entrenadores de Diego Schwartzman.
-¿En qué momento estás después de una temporada consagratoria?
-Fue un año muy duro, muy largo. Estoy contento por el año que tuve y me siento más relajado porque ya terminó el estrés de competir pero, a la vez, estoy muerto y dolorido por la pretemporada, con días muy duros.
-¿Cómo trabajaste con tu equipo la planificación para ya arrancar en Australia?
-Ahora estoy trabajando de manera completa en cemento con la mira en los dos primeros ATP previos al Abierto de Australia. Por ahora creo que voy a jugar los dos torneos ATP porque no hay vuelos comerciales a Australia, así que tengo que irme en el charter el 27 de diciembre. La idea sería, entonces, meter esos dos torneos y después el cuadro de Australia.
-¿Cómo fue el proceso para sumar a Juan Ignacio Chela al equipo de trabajo? ¿Lo hablaste con tu gente y con Diego Schwartzman?
-La idea surgió por parte de mi sponsor, que me dijo que había aparecido una posibilidad de incorporar a Juan al equipo. Lo hablamos con Andy (NdR: Dellatorre, su entrenador), lo hablamos con mi papá (Alejandro Toto Cerúndolo), con todo el equipo, y a todos nos pareció que era una muy buena idea porque nos podía aportar mucho. Entonces Juan habló con Diego para que le diera el OK y Diego estuvo conforme de que pudiera trabajar yo con él. Se dio todo bien, estamos muy contentos y el trabajo viene muy bien.
-¿Cuál es el plus que puede aportarte Chela?
-Me puede dar muchas cosas, no sólo una, pero por haber estado 15 del mundo tiene mucha experiencia; trabajó muchos años con Diego y me puede aportar mucha información que por ahí nosotros no tenemos. Estoy muy contento.
-¿Cuáles son los tres momentos que te marcaron en la temporada?
-Creo que primero está el Córdoba Open, después el hecho de haber jugado el Next Gen Finals y, por último, lo que viví en la qualy de Roland Garros (ganó sus dos primeros partidos en un Grand Slam y cayó en la última ronda tras perder en dos horas y media con el suizo Henri Laaksonen).
