Primera División

INDEPENDIENTE: COPA LIBERTADORES, MISIÓN (CASI) IMPOSIBLE

El equipo de Jullio Falcioni cuenta con las últimas chances de poder alcanzar la tan ansiada clasificación al máximo torneo continental de clubes. Mañana enfrenta a Boca Juniors, el rival a destronar en la tabla anual.

Por Redacción EG ·

23 de noviembre de 2021

El gran objetivo que Independiente se propuso al alejarse de la lucha por el campeonato, fue la clasificación a la Copa Libertadores. Lo cierto es que después de la derrota ante Central Córdoba en Santiago del Estero, la cosas se complicaron.

Haciendo historia en la actual Liga Profesional, tras el empate en la fecha 10 ante RIver Plate, Independiente sumaba 19 puntos y era escolta de los líderes Talleres y Lanús lo superaban por un punto. El equipo de Marcelo Gallardo sumaba 18 unidades, uno menos que el Rojo.

De esa fecha en adelante el rendimiento del equipo de Falcioni se desplomó. River en 11 partidos sumó 31 unidades, mientras que Independiente en la misma cantidad de encuentros tan solo 12.

Esa pobre cosecha repercutió en la tabla general y puso al Rojo entre la espada y la pared a falta de cuatro fechas para el final.

Boca Juniors suma 58 puntos y se ubica en la quinta posición de dicha tabla, siendo el último clasificado para la Copa Libertadores 2022. El equipo de Julio Falcioni quiere quedarse con ese lugar, pero para ello lo primero que debe hacer es imponerse en el clásico a jugarse en Avellaneda.

De lograr el resultado quedaría a cuatro puntos de Boca Juniors, con nueve en juego y con otros competidores. Estudiantes y Lanús tienen 54 unidades y también pujan por el cupo que se liberaría si Boca o Talleres son campeones de la Copa Argentina.

La única posibilidad que tiene Independiente es ganar todo lo que queda, comenzando mañana en el clásico y que tanto Estudiantes cómo Lanús sumen la menor cantidad de puntos posibles.

Falcioni y los suyos saben que las últimas fichas están en juego y que el margen de maniobra es casi nulo, tropezar frente a Boca Juniors sería la despedida del último y único objetivo que le queda al equipo de Avellaneda hasta fin de año.