Auto in

Brasil es la nueva meta del bicampeón Néstor Girolami

Dueño del “1” del Super TC2000 y sin lugar en el TC, el cordobés decidió este año vivir otras experiencias y el Stock Car le abrió sus puertas. Su agenda internacional igualmente no está cerrada y anhela con probar suerte también en otros horizontes.

Por Redacción EG ·

17 de marzo de 2016
Imagen Nuevos aires para el Bebu Girolami, que correrá todo este año en un competitivo Stock Car brasileño, con autos y pilotos de renombre.
Nuevos aires para el Bebu Girolami, que correrá todo este año en un competitivo Stock Car brasileño, con autos y pilotos de renombre.
Como la mayoría de los pilotos, sus comienzos fueron a toda velocidad en los kartings, aunque lo llamativo en él fue que a los 3 años ya estaba trepado y aprendiendo de una manera asombrosa los secretos de acelerar, frenar y sobrepasar a los rivales. Y su ascenso prácticamente no tuvo interrupciones, porque después de sumar varios títulos zonales, regionales y nacionales en distintas categorías de kartings, pegó el salto a los 15 años a la Fórmula Renault y sus cualidades al volante continuaron a la vista. Néstor Girolami, más conocido en el ambiente fierrero como el Bebu, ya en la incipiente adolescencia tenía bien decidido qué quería hacer de su vida. Y para hacer realidad ese sueño de convertirse en piloto, mucho tuvo que ver el respaldo que recibió desde el vamos cuando lo convocaron para correr en estructuras oficiales y no debía estar penando en sí conseguía o no completar el presupuesto.

 A Girolami siempre se lo definió como un piloto pensante, que más allá de los imprevistos propios de una competencia, él cuenta de antemano con una estrategia y analiza una y todas las veces que sea necesario qué decisión afrontar. Por eso, este gran cambio de no competir durante el 2016 en la Argentina y probar suerte en el exterior habrá sido muy meditado por él. Y a los 26 años sale al ruedo en el Stock Car brasileño, sustentado en dos frases que subió a su twitter: “Para que pueda surgir lo posible es preciso intentar una y otra vez lo imposible”. Y una vez abrazado a su bicampeonato en diciembre último de Super TC2000, escribió: “No abandones nunca las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario”.

El cordobés del pintoresco pueblo de Isla Verde se incorporó a la estructura del Schin Racing Team, comandado por el ex piloto brasileño Carlos Alves. Llamativamente será el segundo extranjero en afrontar una temporada entera en el Stock Car, ya que el portugués Pedro Queiroz Pereira lo hizo allá por 1981 y 1982. Como invitados sí aparecen antecedentes de participaciones argentinas, inclusive en el 2015 el mismo Girolami ganó una de las carreras en esa condición en el circuito de Goiania en binomio con el local Ricardo Maurício.

Fiel a su espíritu inquieto, Girolami desde los primeros días de enero ya se encuentra en Brasil intentando asimilar toda la información necesaria para que la adaptación a su nuevo equipo no tenga contratiempos.

Imagen El podio consagratorio en el autódromo de San Luis, escoltado por Pernía y Canapino, que le permitió a Néstor Girolami abrazarse a su segundo título de Super TC2000 consecutivo.
El podio consagratorio en el autódromo de San Luis, escoltado por Pernía y Canapino, que le permitió a Néstor Girolami abrazarse a su segundo título de Super TC2000 consecutivo.
-Estoy aprendiendo portugués y siguiendo de cerca los trabajos del equipo en cuanto a la preparación del auto. Hicimos una serie de test que me resultaron muy útiles. Además, como parte de la preparación también realizamos entrenamientos en el kartódromo internacional Ayrton Senna, donde un ídolo como él practicaba desde chico. Fue una emoción tan grande conocer ese lugar y girar allí que me cuesta mucho traducirlo en palabras.

-Si bien Stock Car es una categoría conocida en nuestro país, debido a que cuando decidió cruzar por primera vez las fronteras brasileñas compartió los 200 Kilómetros de Buenos aires junto con el TC2000, ¿cómo la describirías en estos momentos?
-Es una categoría que ha crecido mucho, está muy fuerte, con autos que cuentan con poderosos motores V8 de 580 caballos, tracción trasera y 1300 kilos. El calendario incluye circuitos importantes y con pilotos de renombre como Rubens Barrichello, Ricardo Zonta y los hermanos Cacá y Popó Bueno. La temporada arrancará el 6 de marzo en Curitiba y terminará el 11 de diciembre en Interlagos, con 12 carreras y 10 circuitos diferentes. 

-Y llamativamente te mantendrías al volante de un Peugeot…
-Sí, seguiría defendiendo la marca, no con Peugeot Argentina, pero en un auto que conozco muy bien y me ha dado muy buenos resultados.

-¿Se complicaba hacer las dos categorías en argentina y Brasil?
-Sí, porque hay una superposición de fechas. Y los dos equipos merecen toda la atención. Me hubiese encantado correr en las dos, pero no se pudo sincronizar. Estoy muy agradecido a todo el equipo Peugeot de Super TC2000 y ahora quiero enfocarme por completo en Stock Car, porque sería muy importante arrancar el 6 de marzo siendo protagonista y pelear por el título en Brasil.

Imagen Rendidor andar de su Peugeot 408.
Rendidor andar de su Peugeot 408.
-¿Y si te llamaran como invitado a los 200 Kilómetros de Super TC2000?
-Si no hay superposición de fechas, allí estaría. Sería una sensación extraña correr en mi auto como invitado.

-En diciembre viviste un momento exultante al consagrarte campeón por segunda vez en el Super TC 2000…
-La verdad que fue una alegría inmensa el convertirme por segunda vez campeón en una categoría tan competitiva y tan profesional como el Super TC2000 y por haber repetido el éxito con Peugeot después de tanto tiempo. Lo hecho significa mucho y es realmente muy importante. Obviamente que ha sido un campeonato muy parejo y por eso llegamos siete pilotos con posibilidades a la última carrera con todo lo que ello significa. Y el triunfo en San Luis nos permitió cumplir con todos los objetivos, porque nos quedamos con los títulos de marcas, por equipos y con el de pilotos.  Mejor, imposible.

-¿Qué diferencia encontrás entre los dos títulos?
-En el 2014 habíamos sido muy regulares, ya que había sumado puntos en las 12 carreras y en el campeonato de 2015 paramos en 3 de las 12. Por eso, esta vez llegamos con muy pocos puntos de diferencia y eso hizo que el campeonato se pusiese mucho más difícil para nosotros. Tuve que salir a todo o nada en la última fecha y lo logramos. Sabíamos de antemano que iba a ser una carrera movida, porque tanto Leo Pernía como yo necesitábamos llegar uno adelante del otro, y bueno se me dio a mí producto de una gran carrera. Dejamos todo en la pista, con maniobras al límite, pero en definitiva con mucha lealtad.

Imagen Su atención permanente al acondicionamiento físico.
Su atención permanente al acondicionamiento físico.
-¿Cuánto ayudó hacer la pole position y qué tan clave resultó ese roce con Pernía? 
-Sin dudas, el haber hecho la pole fue un plus, luego Leo largó muy bien y recuperó la punta, y ahí empezó otra carrera en la que tuvimos que estudiar cada lugar de sobrepaso. Esperé mi oportunidad y cuando a Leo se le desacomoda el auto por el roce mío, entonces ahí la presión de los rivales se empezó a sentir porque se venían todos para adelante y creo que haber llegado a esa instancia decisiva con un gran auto me permitió volver a la punta, buscar la victoria y con ella lograr el campeonato.

-Fue un gran cierre para el equipo…
-Todo el 2015 se trabajó muy fuerte en el equipo Peugeot, y este campeonato tuvo un sabor especial porque revalidar un título nunca es fácil. Hubo que redoblar los esfuerzos para repetir el éxito. Y sobre el final, cumplimos el desafío de lograr el objetivo.

Por Walter Napoli 

Nota publicada en la edición de febrero de 2016 de El Gráfico